Una vez más me encuentro de viaje, y, se me ocurre subir contenido al blog. Me encuentro en un viaje de coche de 2 horas y media. Tranquilos, me acompaña un disco de Mägo de Oz, Gaia I.
Antes de embarcarme en esta travesía, jugué, junto con mi equipo de hockey, un partido. Un partido que perdimos. Esto, obviamente se debe al hecho de que el otro equipo era superior en muchos aspectos. Pero en uno era en el que nos superaban mucho. Moralidad. Mi equipo salió al campo sabiendo que iba a perder, mientras que el contrario salió sabiendo que iba a ganar. En mi humilde opinión, ningún comportamiento de los equipos es correcto. No conviene salir confiado, ni salir desmoralizado. Hay que salir y dar el máximo posible, pasárselo bien y, si se da el caso, ganar. Esto se atribuye a muchos deportes, no solo hockey, os hablo sinceramente. No salgáis a jugar pensando que ganareis seguro, porque el otro equipo es inferior. Ni salgáis pensando que os van a dar palos por todos los lados. Salid pensado que vais a pasar un buen rato, con vuestros amigos y vais a jugar lo mejor que podáis.
Sin embargo , no todo son risas. Algún día habrá un partido importante y solo cogerán a los "mejores". No os engañéis. No son mejores y no les cogen por serlo. Les cogen porque marcan goles, o canastas. Lo sé, este sistema es asqueroso. He visto jugar a míticos equipos que aseguraban tener "lo mejor de lo mejor" y verlos perder, por no pasársela entre ellos. Por "chupar bola". No me malentendáis, no todos los jugadores son así, pero, por cada 5 chupones, hay 1 que sabe como jugar y entiende de estrategias.
Chicos, el sistema deportivo actual es horrible. No os dobleguéis ante él, intentad ser mejores que él y, algún día, si os llega la oportunidad, cambiadlo.
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